lunes, 31 de diciembre de 2012

Mis doce del 12 *



Enero
- Verano ilusión, ideas sofocándome las sienes y sentimientos encontrados, te extrañaba mucho entonces, me llevé para el viaje de vacaciones un trozo de tus labios y un retazo de un amor puro que iba surgiendo, tu adorado regalo de infancia endulzado con tu aroma, tu carta delicada y tu caligrafía desfasada, los gráficos de colores que pintaste para mi y tus brazos enterrados en mis espalda, mi amor que surgía en tus cenizas y mis deseos infinitos de bailar para tus ojos y hacer de ti el felino más feliz del universo, el felino más sonriente y alegre, el felino de vida y muerte, el felino de fantasía, el felino de mi vida.

Febrero
-  Catorce de duelo, mi cariño desbordante fui esquivado, partiste mi alma en pedazos y me dejaste escapar sin correr tras mis pasos, me dejaste llorando y fuiste cruel, villano y desgarrador, lanzaste sobre mis moléculas una sonrisa malévola mientras me iba derritiendo y me dejaste morir, no te dio la gana de correr a buscarme, no te dio la gana de luchar para arrancarme el dolor, no te dio la gana de venir a salvarme, no te dio la gana de ser mi héroe, no te dio la gana de convertirte en mi ángel de amor.

Marzo

- Estocada mortal, bajé la luna y las estrellas para hacerte vibrar y me mandaste a volar, cerraste mi visión y me nublaste el corazón, fue ese domingo azul, cuando te vi con un manta de tul esmerado en cuidar y proteger a alguien más, del viento helado que osaba flagelar su piel, me paralicé en el tiempo y te maldije hasta reventar, saliste huyendo y huyeron contigo los días soleados y llenitos de fe,  nadabas en traición, hervías en antología. Te lloré hasta desvanecer esa noche, te odié al día siguiente, perdoné tu acidez segundos después,  te volví a odiar con más fuerza y te volví a perdonar, te odié y perdoné, te perdonaba mientras te iba odiando, te odiaba con las fuerzas que me quedaban y se iban apagando, te perdoné con la estupidez amparada por mi ternura.

Abril
- Olvidarte a medias, le di vuelta a la página del libro de mi vida, te alejé de mi versos, entendí que no debía sentirme culpable, te entregué casi todo y si bien salí destrozada, le otorgue a la flor de nuestro amor, sinceridad y lealtad duradera,  comprendí que debía de seguir cantando sin llorar, caminando sin brincar, y volando sin salir  por la puerta trasera,  debía entonces empezar a  suprimir el cariño para minimizar el dolor, pero no por completo, a medias para que no doliese tanto tu partida definitiva, a medias para recordarte, para darte la posibilidad de volver a revolcarte en mi dulzura y disfrutar de mi inmenso deseo de volver a curar tus heridas de guerra, de esas ganas locas de volver a acariciarte durante toda la eternidad y escapar de tu mano hasta los suburbios de la nostalgia pura.


Mayo
- Dándole cabina a un nuevo sentimiento, me pidieron que probase a ilusionarme de la ilusión y juro que lo intenté, besaron mis labios sangrantes y quisieron que fingiese gusto o placer, no se me hizo justo jugar a un falso encanto magistral, a jugar con el amor creyendo que puede el ser humano arrancar a un clavo con otro clavo, como si fuese fácil, cuando se ha querido con la cabeza fusionada al corazón, cuando se ha querido por encima de los defectos y los daños existenciales, cuando se ha querido de verdad y con candidez, cuando se ha aprendido que enamorarse del amor es aún más hermoso  porque se aprende a amar con TODO.


Junio
- La soledad y yo, decidimos darnos tiempo para disfrutar, de los amigos de siempre, de la belleza de la música y el misticismo de la fotografía, disfrutar del dolor, del masoquismo sublime, disfrutar de todo aquello que el encantamiento diluye, disfrutar de la naturaleza y de la magia de capturar admiración en la creación de detalles, disfrutar de las sonrisas del niño de mis ojos mientras le salían los primeros dientes y aprendía a vocalizar mejor con el transcurso de los días, inyectándome vida en una prolongada terapia de resurrección, cogí un bolso cargado de arrepentimiento, orgullo mancillado y dolor atrapado en la garganta, y me fui a dar un paseo de desprendimiento, até los recuerdos a las nubes y las dejé partir, crecí un poco entonces y crecieron mis ganas de olvidar y seguir resurgiendo el amor propio, hilvanando mi ego deshecho y cociendo el entristecido corazón, remendándolo por completo.


Julio
-  Volví a morir, fueron tardes tragicómicas en las cuáles deseas extrañar a alguien para ir por los suelos vomitando lágrimas, se necesita una excusa perfecta para expulsar el alma en cada gota de dolor, necesitaba sentir que las ideas me destrozan las razones para sentirme viva, se me fue quebrando la razón congelaba y deseaba gritar, insultar, maldecir, me pinté de azul fosforescente y los recuerdos que no volvían, regresaron recargados, los obligué que vinieran a destrozarte, danzó la memoria selectiva y me perdí sin nada que pensar, sin nada que sentir, sin nada que olvidar. 

Agosto
- Aire y perdición, quemé tus heridas, acabé con tu imagen impresa en la cabeza, te destruí por completo, te alejé de mis sueños y desvié tu respiración, te deshilaché de punta a punta, te arrojé al viento, y te fuiste volando como una cometa del mal, te golpearon las nubes y te aborreció el sabio sol atrapó tus miserias hasta volverte fuego y te vio arder en el infierno, te alejó, te diseminó, y  pude sonreír por fin, pude ser quien era y salté sobre tus miserias, te aplasté hasta contemplarte hecho nada, y te fuiste pudriendo, caminando descalzo, sin rumbo ni dirección, te arranqué con los dientes el boleto de viaje para el regreso y te perdiste en el desierto de mi indiferencia, de mi abandono, de mi coraje para desprenderme de lo tuyo, de tu estúpida y perfecta forma de hacerme infeliz, te atrapó la sequía de amor, te consumió el egoísmo, la cobardía y explosionaron las dagas que clavaste dentro de mi, fui libre al fin.

Setiembre
- Renací, le desperté con luz a setiembre y correteé por los campos rozando flores de colores, me vestí de fiesta y escribí mi mejor canción, decidí entonces que la próxima vez que sintiese amor por alguien, sería un alguien con un ángel dentro de si, un ser virtuoso con poderes especiales y dignos de admiración, un misterioso alguien sobrenatural. Le desperté con la fuerza de siempre y respiré libertad total, le aposté al corazón nuevamente y quise volver a vibrar,lentamente, poco a poco, sin prisas ni apresuramientos, con romanticismo ardiente y caluroso. 


Octubre (*)
- Puesta de sol (Sunrise),me crucé con un ángel en el camino, suelen llamarlo destino, yo lo denominé "sendero de la felicidad", curó mis heridas mi ángel y calmó mi sed de cariño, de ternura y de cobijo existencial, amarró mis manos a su espalda y me llevó a volar por un mundo mágico, cálido y lleno de sonrisas por descubrir, besó mis mejillas con dulzura y me desvanecí en medio de lágrimas, hacía mucho que no lloraba mientras brotaba alegría en mi corazón, no era para menos, encontré al complemento ideal hacerle frente y darle batalla a la vida macabra, dolorosa, punzante; me invadieron los motivos para no morir una vez más, desde entonces venimos luchando contra demonios internos y vamos caminando por los mundos mientras vamos gozando de pequeños momentos que se hacen eternos y permanecerán siempre en nuestras mentes, hasta lo infinito de lo infinito, cuando no nos quede más por sufrir o más por reír, enlazaremos las manos y podremos jurar que hemos aprendido a ser felices a pesar de los tiempos oscuros con temblores y azotes de color naranja perpetuo, violento.


Noviembre
- Dulce noviembre, aprendí que existen personas que hacen de la vida un mejor lugar, una melodiosa estadía que adorna los días y los mantiene estables, son seres enviados por Dios para equilibrar la tristeza y la alegría, se encargan de cuidar los sueños y de que estos no adormezcan tanto hasta el grado de dejarnos perdidos en el letargo, se esmeran en protegernos de la tentación de hacer el mal, que va surgiendo en el hombre por inercia desde la caída del vientre, del cielo al suelo; se desviven por darnos tranquilidad en medio de tanta guerra, cierran nuestros ojos y nos impiden ver la realidad enlodada. Aprendí que puede uno toparse con seres celestiales y puros de corazón, quienes están dispersos en el mundo, esperando por alguien más y siempre alertas a las necesidades de quienes se crucen por el camino con el espíritu débil y esquivos de felicidad. Aprendí que estaban esperando por mi mientras me encontraba dando vueltas en círculos, perdida en un laberinto de tragedia y melancolía; esperando para atarme de pies y manos para llenarme de amor. 


Diciembre
- Tiempo de facturación, acabo de entender que la vida es un negocio, existen períodos de ganancias y otros de pérdidas, se suman momentos felices y se van restando los grises, estruja, consume, enloquece. Es una transacción constante en la cual deberías dar y recibir,    entregar cariño con gran intensidad y recibirlo con la misma fuerza, y cuan bonito sería si rebotase todo lo bueno que se ha entregado, rebotase la felicidad que se da y volviese después para fortalecer la vida herida, es un juego constante en el que se apuesta a morir o vivir. Mi doce final me grita que van naciendo mariposas en la razón, que tengo los ojos vendados y me guía el corazón, que voy sintiendo que siento mientras voy sintiendo aún más, que ha llegado alguien especial y diferente, que va surgiendo energía de amor después de tanto vuelo, luego de naufragar y naufragar en medio de llanto y desesperación, mi doce final se despide con una sonrisa dorada.



* Hasta pronto 2012, nos veremos el día de mi juicio final,
te regalaré una sonrisa y invitaré a evocar,
serás perpetuo e infinito,
serás siempre digno de una sonrisa en el alma,
serás alegría en la memoria, porque has sido GRANDE.

Gracias.


1 comentario:

  1. algo me dice que el mes de diciembre me encanta, fue el mes final pero es la apertura al nuevo año a los nuevos 12 que te esperan solo con mente positiva ADELANTEEE!!!!! Feliz Año ;) que ya lo iniciamos

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