lunes, 21 de diciembre de 2009

Pregúnta "Si te Q.U.I.S.E"

Esta tarde volví a soñarte, corrección a "soñarlos" porque ahora son ya dos como alguna vez lo fuimos tu y yo UN MUNDO, UN CORAZÓN. Reconozco para tu satisfacción que esta vez también llore ya que conoces a la perfección mi absurda susceptibilidad; ME CONOCES muy bien desde la primera vez que corriste hacia mi con los brazos abiertos de par en par quebrando así el témpano de hielo que en mi solía habitar.

Soñé que lo mimabas como alguna vez yo lo hice, secabas sus lágrimas con mágicas pócimas que yo te enseñé a pronunciar con cautela como quien que a un invidente consuela. Ahí estabas tu desplazándome del lugar que tan generosamente yo puse a disposición, ignorando que serías precisamente TÚ quien más tarde lo ocupase y de punta a punta a ceder se rehusase.



Por favor, por favor repito mientras logro huir de la tristeza; no quiero volverte a contemplar mientras cierro los ojos, a lo lejos necesito arrojar tus despojos, está doliendo demasiado tu traición me has gangrenado la razón, aquella que una vez curaste ¿ lo recuerdas? protegerme juraste, me niego a la posibilidad de odiarte ¿como hacerlo? si hasta hace unos meses todo me sabía a adorarte, ¿como? si eras uno de los más bellos recuerdos que me iluminaba a diario al contemplar tu fotografía al lado del armario.

Empero mi ya mencionado sueño fue menos doloroso de lo que me ha tocado vivir estas últimas semanas, se me dio por oír a lo lejos algunas campanas; y ya ahora resignada algo atontada me de dado cuenta que anuncian tu "deceso"; aún en trance camino en dirección a tu lápida lentamente para luego escribir mi más triste epitafio "PREGUNTA SI TE QUISE".

Fuiste tú la que decidió, no vengas con tonterías justificando tu acción esperando con ironía una buena reacción; no te declaro la guerra porque no tendría sentido alguno ni revelaré tus secretos uno por uno, ni he de maldecir tu nombre ni me mofaré de todos tus defectos ni espiaré celosamente vuestros trayectos, no haré nada de eso porque sabes que no soy vengativa, empero de tu día a día desde este momento me declaro fugitiva. Que tu aura jamás vuelva, quiero evitar malos tratos o derramar aún más lágrimas por sucesos baratos.

Adiós [!]